Trágico fin de semana el que vivió Veracruz.
De nueva cuenta la cifra de asesinatos en diferentes puntos de la entidad es alarmante.
Sin precedente en esta noble tierra veracruzana.
Más de una docena de asesinatos.
Ese fue el recibimiento otorgado a la Guardia Nacional.
Bastaron menos de 72 horas para que distintas regiones de la entidad se tiñeran de sangre.
Lo anterior es el resultado de la indiferencia de la administración federal y la falta de acción de las autoridades judiciales locales.
El aumento de la violencia es un fenómeno compartido por los tres órdenes de gobierno y que se arrastra desde administraciones anteriores, recrudeciéndose en los últimos meses.
A leguas se percibe la falta oficio político por lo que el ambiente se ha enrarecido.
El pleito entre el hijo de Atanasio y el fotógrafo oficial de la familia Yuanes Márquez, entiéndase el fiscal general del estado Jorge Winclker, aquí se ve reflejado, ambos no están dando los resultados que se necesitan para ofrecer seguridad en la entidad.
La situación la han llevado a límites tan espinosos, que no existe coordinación de esfuerzos institucionales para reducir la inseguridad.
Cada quien defiende sus intereses, procuran sus grupos, sus parcelas, dejando en el vil abandono a millones de veracruzanos.
La violencia ha escalado niveles tan complicados que ya en repetidas ocasiones, el clero ha emitido varios comunicados resaltando los altos índices de inseguridad que vive Veracruz.
De igual forma el llamado, enérgico, al hijo de Atanasio y a los responsables de brindar seguridad a los veracruzanos los he hecho realidad.
La inseguridad y la violencia galopan sin discriminación por todo el territorio veracruzano.
Tristemente, en Veracruz, los delitos de alto impacto como los asesinatos, los secuestros o la desaparición de personas, son el pan de cada día para millones de ciudadanos.
Se ha perdido la capacidad de asombro.
Lo cierto es que Veracruz se ubica en medio de un charco de sangre.
DIP. ROSALINDA GALINDO.
Tuvieron que pasar más de diez meses, ya tapizada como parlamentaria, para que la actual diputada local se diera cuenta de la urgente necesidad de rescatar la áreas verdes.
Por favor.
Nada más hueco que lo expresado por la diputadita.
A la señora lo que le sobre interesa es que su familia no viva en el error, que cobren su buena mesada y que disfruten de las miles “del pinche poder”.
Eso es cinismo, eso es valemadrismo puro. No chingaderas, total para es goza de la complacencia del dizque gobernador.
¿Entonces, donde está el problema?
Por eso, lo que sí hizo al instante fue rescatar a su parentela y acomodarla en puestos claves de la actual administración que mal dirige el hijo de Atanasio.
Le cuento.
A la diputadita lo primero que le preocupo fue matarles el hambre a sus parientes, los incrusto en la nómina oficial logrando que perciban jugosas mesadas. Que se embolsen sus buenos billetes.
Los nombre de sus parientes que puntualmente reciben su salario ya se han dado a conocer, pero es tanto el descaro de la señora que en un acto de valemadrismo ni se inmuta, le da lo mismo, actúa con la misma desfachatez que el hijo de Atanasio.
Y procede así porque son del mismo chiquero, los corta la misma tijera.
Actualmente a Rosalinda, lo que le ocupa es la presidencia municipal.
Una vez que ha escuchado el canto de las sirenas, Galindo Silva anda toda extraviada, en su mentecita solo anida la quimera de ser la próxima alcaldesa de Xalapa.
Su marido, un amorfo sujeto que hace las veces de regidor, ya trabaja sobre el tema, según él, anda tejiendo fino, anda haciendo amigos, todos los días se masca una caja de chicles para tratar de convencer al electorado xalapeño.
La campaña que lleva a cabo es de suela y saliva, por eso la mascadera de gomas endulzadas.
Lo cierto es que Rosalinda se atiene a las criadillas del señor López Obrador, de nueva cuenta la inercia de tabasqueño la puede encumbrar, porque de otra forma no se le ve por donde logre levantarse con el triunfo.
EN PEROTE.
Buen trabajo el que lleva a cabo la actual comuna.
Su alcalde Juan Francisco Hervert Prado, trabaja sin distinción de siglas o colores partidistas, la política de puertas abiertas es toda una realidad para los peroteños.
El sentir de la población es que cuentan con autoridades locales incluyentes, que se desempeñan bajo la premisa de pluralidad.
En escaso un año Hervert Prado ha trasformado el rostro de Perote.
Su Centro Histórico es otro, sus calles lucen apropiadas, dignas de los peroteños.
Las congregaciones también han sido atendidas, no se descuida detalle alguno.
Los recursos financieros, aun cuando son pocos, son bien distribuidos, se manejan con transparencia.
La llegada de inversionistas extranjeros ha permitido la derrama de miles de millones de pesos en la región, ha favorecido considerablemente a su gente.
No cabe duda que Perote renace a la modernidad.
Bien.
EL HELICOPTERO.
Para muchas familias veracruzanas el pasado fin de semana fue adverso, pero para una funcionaria estatal estuvo lleno de felicidad, de algarabía y de nuevas experiencias.
Le cuento.
Sin mayor empacho, a través de redes sociales, Magnolia Moreno, jefa de Recursos Financieros en la Secretaría de Gobierno del estado de Veracruz, hizo circular una foto suya presumiendo su fin de semana en las paradisiacas playas de Costa Esmeralda, lo curiosos es que lo hace al lado de un helicóptero oficial.
Si, de una nave propiedad de los veracruzanos y que seguramente ella, ocupo para un viaje de diversión y placer, pretextando asistir al Costa Esmeralda Fest 2019.
El autogiro que le cumplió el sueño a la funcionaria es un Bell Helicopter Textron 407 con matrícula XC-CTZ.
Y donde quedo aquello de que deberá desempeñar el cargo “bajo los principios de legalidad, prosecución del interés público, igualdad y proporcionalidad, respeto a los derechos humanos, verdad material, imparcialidad, sencillez, oficiosidad, eficacia y buena fe, que se demandan en el ejercicio del servicio público”.
Por favor, puras succionadas.
Al igual que el hijo de Atanasio y compañía, se pasa por donde no le da el sol, aquello de no mentir, no robar y no traicionar.
A la basura los mandamiento del señor López Obrador.
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