Decidido, por lo que a mi corresponde, en Veracrúz es imposible vivir con tranquilidad, los servidores públicos no sirven, me estoy refiriendo a los empleados de segundo nivel, esos que se sienten superiores, de máximo nivel y en su prepotente actuar, dejan a los ciudadanos fuera de juego, mal le va a los políticos funcionarios de primer nivel, están quedando fuera de la jugada, si aceptamos que se juega con la administración pública.
Pobres funcionarios públicos, los políticos de nivel Alcaldías y Gubernatura, han tenido que recurrir al mundo de las mentiras, mienten al pueblo con declaraciones de que andamos o estamos viviendo en el Mundo feliz de Aldous Huxley, un imaginario mundo que nos tiene hundidos en la desgracia, la infelicidad derivada del temor a los robos, secuestros y en ocasiones perder la vida, ni modo eso es lo que tenemos que vivir o cambiar de mundo, ir a Yucatán ya pasó de moda pues los yucatecos ya andan huyendo de los desmadres que organizan los cárteles de la droga y demás vaciladas con las que nos tienen sin gobierno, ese con el que soñamos y que algún día feliz se ponga orden en el desorden del que nadie se salva.
Es tan grave la situación, que los delincuentes, hartos de castigar inocentes, la han emprendido contra funcionarios, en principio andan dándole en la maceta a los funcionarios de entidades federativas de poca importancia, pero que no se ufanen de que son respetados los políticos de alto porte, teniendo mayores partidas en su tesoro particular, los hábiles delincuentes no demoran en actuar en contra de ellos, ya han secuestrado personajes de la industria, respetan a los políticos protegidos por una guardia de corps que ni Hitler llegó a tener, pero lo en estos tiempos se juega es con armas de grueso calibre, esas que se pueden comprar en cualquier miscelánea gringa, pasarla sin vista de aduana es fácil, se saltan las aduanas o dan mochada a los vigilantes, estamos perdidos y no sabemos qué camino nos trajo hasta aquí.
Por favor señor Cuitláhuac, dé prez al nombre que lleva, sea generalísimo de las fuerzas del orden, olvide a AMLO, el le elevó a las alturas que aún conserva, pero El Presidente tiene asuntos que atender y pide a los gobernadores que se rasquen con sus uñas, ni modo, con sarnícula o sin ella, tenemos que buscar y encontrar la fórmula que nos permita vivir con cierta tranquilidad, si es necesario conciliar intereses con los cárteles como lo han hecho otros políticos funcionarios, ¡Adelante!.
La unión entre desiguales es en ocasiones más ventajosa que pelear con los malos, recuerden el cuento del pozo maldito, beber de su agua impura para todos igualarnos, después pedir a los gringos que pongan sucursales de las farmacias en que se venden los cañones, con charpes tiradores, no podemos enfrentar a quien esté manejando una AK47 y que sabe usarla sin temor. ¡AGUAS!
Agosto 20 del 2019 lmwolf1932@gmail.com Luis Martínez Wolf |
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