Hemos visto durante toda la vida que los personajes que toman el mando por la vía democrática, o por un movimiento violento, lo hacen apoyados por militares de alto rango, metidos en la política, deseando el poder, algunos lo hacen en favor de la población bajo control, buen gobierno, muchos otros, en connivencia, golpistas civiles apoyados por militares metidos en el ámbito político, imponen a la población un gobierno totalitario, la clásica dictadura en que el poderoso principal forma una camarilla para enriquecerse a expensas de la población sometida.
Es axiomático en la vida de los pueblos, se establecen las fuerzas militares para defensa de su soberanía, función única que es posible al crearse un fuero militar para control de esas fuerzas armadas, el error que cometen los gobernados y los gobernantes, es dar mal empleo a las fuerzas armadas, por ambición de los militares que pretenden apoderarse del poder en una nación, son sometidos los civiles por la fuerza de las armas, en otras ocasiones se da el absurdo, como lo estamos viendo en México, de que los gobernantes, en una torpe decisión, incorporan a las fuerzas armadas a la actividad civil, en la creencia de que podrán dominar a los militares en asociación o complicidad, grave error de los gobernantes civiles, los militares están preparados y concientizados para defender a la nación de las amenazas extranjeras o conflictos internos, pero ejercida su actividad por el poder de las armas.
Mal gobierno está resultando el que le confiamos al primer mandatario, toma decisiones sin tomar en cuenta el sentir o pensar de los ciudadanos gobernados, peor aún, realiza operaciones administrativas despojando de autoridad a quienes conocen el trabajo que el mismo gobernante les confió, lo que está haciendo el Presidente de la Republica, puede resultar muy peligroso para su gobierno, si da poder a los militares sin convenir un plan de gobierno, que puede o está mostrando tiende a la dictadura, los militares, con el sentido patriótico de que están investidos y concientizados, pueden actuar en contra del gobernante, pero lo que parece ser que proyecta AMLO, no es una gobernanza tranquila, el totalitarismo mostrado anticipa una alianza convenida con los militares para control del país y posible instauración de una dictadura, por supuesto, olvidando elecciones democráticas.
El dar poder a las fuerzas armadas en asuntos de carácter civil, pretextando seguridad ante la agresión de fuerzas que dañan a la población y a su gobierno, deja todo en el mayor desorden, pues no es la seguridad que puedan imponer las fuerzas armadas las que pueden poner orden en el desorden propiciado por mal gobierno, existe una Secretaria de Seguridad, constituida y con la preparación del caso, está siendo puesta en ridículo, en poco tiempo, la seguridad será la norma de gobierno para manejo de la Hacienda, la Economía, por supuesto la Marina Mercante y las aduanas, en fin, lo que hace el Presidente de la Republica, merece señalamiento popular. Si caemos en la dictadura proyectada, mal no va, pero si no es el caso y permitimos un gobierno militarizado, peor nos va a ir. ¡AGUAS!
Julio 26 del 2020 lmwolf1932@gmail.com Luis Martínez Wolf |
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