De Veracruz al mundo
DE INTERÉS PÚBLICO
Emilio Cárdenas Escobosa
2021-01-20 / 22:03:51
La violencia criminal no cesa en Veracruz
Iniciado el 2021, en el marco de la emergencia sanitaria por el Covid 19 que todavía va para largo en todo el país y a la que no podemos verle freno, en Veracruz sigue la otra pandemia, la de la violencia criminal, que no da tregua y para la que parece no haber vacuna.







Las desapariciones, los levantones, los secuestros, las ejecuciones, las extorsiones, la quema de negocios, de unidades del transporte público, en represalia por no cubrir cuotas a los delincuentes, la aparición de mantas en diversos puntos del estado con amenazas y mensajes de grupos criminales, son parte de nuestra realidad que por más que se trate de minimizar no puede ocultarse.







El gobierno del estado no ha podido con el problema, por más cuentas alegres que haga o pretenda maquillar la dura realidad.







De 2018 a 2020, con 680 secuestros, Veracruz es la entidad con más delitos de este tipo en el país y Xalapa, el municipio con mayor incidencia en el estado, según datos dados a conocer por la Asociación Civil Alto al Secuestro, presentado el 13 de enero.







Y en cuanto a feminicidios Veracruz es segundo lugar nacional, según lo informó este miércoles 20 en la mañanera desde Palacio Nacional el subsecretario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del gobierno federal, Ricardo Mejía Berdeja.







Seguimos, pues, pese a los discursos y buenos deseos, empantanados en materia de inseguridad.







Para muestra dos botones: el 18 de enero en el municipio sureño de Las Choapas fueron ejecutados 12 hombres, entre ellos el agente municipal de la comunidad Cerro de Nanchital, quienes fueron vendados de los ojos, maniatados, torturados y finalmente ultimados con armas de fuego de grueso calibre. Y ayer miércoles 20 un operativo para rescatar personas secuestradas en la ciudad de Xalapa, en una casa de seguridad a unas cuadras del centro de la ciudad, terminó en una fuerte balacera entre elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y presuntos criminales que se saldó con cinco personas muertas, dos detenidas y seis rescatadas por los elementos de la Policía Estatal de Veracruz. Este operativo que causó gran alarma entre los vecinos de la céntrica avenida Murillo Vidal de la capital del estado evidenció una vez más la gravedad del problema.







Es evidente que en todo el estado, pese al esfuerzo de los cuerpos de seguridad, con todo y la concentración de efectivos y el apoyo de fuerzas militares federales para intentar frenar la ola de violencia que siega vidas, genera miedo, zozobra y lastima gravemente la convivencia social, esta otra pandemia no puede contenerse.







El problema requiere atenderse con toda la fuerza gubernamental, pero precisa, sin duda, del respaldo de la sociedad para que se le ataque de manera más efectiva.







La lucha requiere abrir frentes en varias direcciones que vayan más allá de las acciones meramente policíacas y militares.







Es vital que a la par de tomar las medidas emergentes para contener la violencia y continuar la lucha contra el crimen, se den pasos efectivos en el fortalecimiento de nuestra economía para ofrecer alternativas reales de empleo e ingreso y se “desnarcotice” la actividad económica de muchas regiones, además de que urge transformar la visión imperante en el imaginario colectivo, especialmente de los estratos de menores ingresos, de que la actividad del narcotráfico, si bien implica una vida de sobresaltos y clandestinidad, se compensa ampliamente con el poder y riqueza que genera, por lo que muchos jóvenes suponen que bien vale la pena correr el riesgo ante la falta de oportunidades; estimulados, desde luego, por las series sobre narcos y toda la parafernalia que se ha creado en torno a ellos y la aureola de “prestigio” de algunos santones de esta ilícita actividad, en lo que es a todas luces una apología de la violencia al alcance de cualquier televidente.







Así como se debe poner un dique a la penetración del narcotráfico en la actividad política, en las campañas electorales y en las finanzas de los partidos políticos. Urge fortalecer las facultades de fiscalización de los órganos electorales y se obligue en verdad a los partidos y candidatos a informar puntualmente sobre las fuentes del financiamiento privado a sus campañas internas y al proselitismo que realizan en épocas electorales, como la que ya está en marcha, para evitar que sirvan como vehículos para el lavado de dinero. Esa es, a no dudarlo, una de las asignaturas pendientes y de la mayor relevancia en el combate al crimen organizado.







Pero en toda esta historia tiene un lugar especial la prevención del delito y el castigo a las conductas antisociales, que es la tarea de las instancias de seguridad y de las fiscalías.







Es evidente que la penetración del narco en las estructuras de poder y en las corporaciones policíacas, el lavado de dinero, el boom del narcomenudeo, la colusión de jueces y autoridades con los barones de la droga para dejar libres a los criminales son moneda corriente y explican lo infructuosa que resulta las más de las veces la guerra contra el narcotráfico.







Es la corrupción que todo corroe y echa por la borda todos los esfuerzos para hacer efectivo el Estado de Derecho.







Ahora las autoridades piden paciencia al ciudadano mientras se desarrolla la lucha contra los grupos delincuenciales, al tiempo que tratan de convencernos de que la entidad mejora en las estadísticas de criminalidad que registran las instituciones públicas en la materia. Sin embargo eso ya nos lo han dicho desde hace años en el país y en Veracruz, particularmente, y la sangría continúa.







Surge entonces la interrogante: ¿No hay salida posible? ¿Estamos condenados a convivir con esos niveles de violencia e inseguridad?







Ante ese panorama ¿están obligados sociedad y gobierno a rendirse ante el peso, influencia y amenazas de los criminales? Desde luego que no.







La lucha contra el crimen organizado no debe admitir tregua ni negociación o tolerancia con los grupos delincuenciales.







Sin embargo, más allá de todo ello, cualquier acción de combate a la delincuencia que busque el éxito debe partir de un hecho simple y fundamental: que se castigue al que delinque, que pague a la sociedad todo aquel que quebrante la ley.







No puede ni debe haber permisividad. Llámense como se llamen los infractores deben ser sancionados, porque la impunidad prohíja más y más graves delitos.







No podemos acostumbrarnos a convivir con la violencia. Ni dejar que se repitan los crímenes porque no se les castiga. Esa debe ser la exigencia ciudadana que más ayudará en esta batalla.







jecesco@hotmail.com



www.deinterespublico.com

Nos interesa tu opinión

>
   Más entradas
ver todas las entradas
• Ódiame más 2023-04-27
• Militares empoderados 2023-04-19
• La prisión preventiva oficiosa debe terminar en México 2023-04-12
• Todos somos migrantes 2023-03-30
• Enemigo al acecho: el periodismo incómodo 2023-03-15
• 8 de marzo, día de lucha y concientización 2023-03-07
• ¿Ciudadanía informada? 2023-02-24
• La corrupción, nuestro eterno retorno 2023-02-09
• El alarmante diagnóstico del INE sobre el Plan B 2023-01-27
• Los reacomodos del morenismo veracruzano 2023-01-12
• Sí se tocó al INE 2022-12-07
• Se acabó el sueño mundialista 2022-12-01
• Se acabó el sueño mundialista 2022-12-01
• La reforma electoral va, pese a marchas y marchantes 2022-11-15
• El fin del TEJAV, el acoso al ORFIS y la simulación del combate a la corrupción 2022-10-25
• Tras el lopezobradorismo, ¿Podrán los civiles domar a las fuerzas armadas? 2022-10-05
• Ayotzinapa: crimen y encubrimiento 2022-09-26
• Adiós a la prisión preventiva oficiosa 2022-08-30
• El negro panorama económico 2022-08-12
• La Morena se echó a perder 2022-08-03
• Las prácticas políticas de Morena 2022-07-28
• Políticos ricos y pueblo pobre: los ofensivos salarios 2022-07-20
• ¿En verdad irán tras Peña Nieto? 2022-07-07
• Justicia a la carta 2022-06-21
• La nueva disputa por la Nación 2022-05-24
• La crisis de la procuración de justicia en Veracruz 2022-05-18
• Adiós al Acuario de Veracruz 2022-05-18
• La necesaria reforma electoral (II) 2022-05-10
• Negociar, la clave para la reforma electoral (I) 2022-05-06
• México, territorio feminicida 2022-04-25
• ¿Se pudo haber evitado el rechazo a la reforma eléctrica? 2022-04-18
• El informe de la ONU sobre desaparecidos en México 2022-04-13
• La consulta para la revocación de mandato se pervirtió 2022-04-06
• ¿Se puede alcanzar la transformación del país al margen de la ley? 2022-03-31
• El costo de la guerra 2022-03-23
• El mal fario del Sistema Anticorrupción 2022-03-15
• La lucha de las mujeres 2022-03-07
• El principio de autoridad ¿por encima del estado de derecho? 2022-02-28
• La reforma electoral que viene 2022-02-22
• La Casa Gris y su daño al discurso presidencial 2022-02-16
• El movimiento por la justicia alimentado por la cerrazón gubernamental 2022-02-08
• ¿Y las víctimas del delito de ultrajes a la autoridad? 2022-01-31
• El periodismo: la profesión más peligrosa 2022-01-26
• 2022, un año que nos pondrá a prueba 2022-01-11
• Al Tribunal Electoral de Veracruz nadie lo vigila 2021-12-14
• El enojo presidencial y el papel de los medios 2021-11-29
• La Cuarta Transformación después de AMLO 2021-11-21
• Gutiérrez Luna y el enojo de Cuitláhuac 2021-10-26
• ¡Viva la impunidad! 2021-10-12
• Sin redes sociales no hay vida 2021-10-07
• El gobierno de la 4T contra la ciencia 2021-09-23
• Lo que el viento nos dejó 2021-08-26
• La consulta amañada 2021-08-02
• El país se pinta de guinda 2021-06-09
• Garantizar la legalidad o dar gusto al presidente, el reto de los tribunales electorales 2021-05-28
• La transformación de la esperanza por la que millones votaron 2021-05-06
• La polémica de los libros de texto gratuito 2021-04-26
• Morena pone al presidente de la SCJN en el ojo del huracán 2021-04-18
• Campañas ¿Entre la indiferencia o el rechazo ciudadanos? 2021-04-04
• Para que funcione el Acuerdo por la Democracia se necesitan demócratas 2021-03-23
• Protesta social y libertades bajo amenaza 2021-03-17
• Feminismo en tiempos de la 4T 2021-03-04
• La fiscalización fallida y la opacidad en el uso de los recursos públicos 2021-02-25
• Elegir a ciegas 2021-02-03
• Las lecciones del escándalo americano 2021-01-07
• El reto electoral no será fácil 2020-12-16
• Combate selectivo a la corrupción 2020-12-09
• La terca memoria: el crimen de Regina Martínez 2020-12-07
• La pandemia interminable 2020-11-30
• ¿Habrá consecuencias en Veracruz tras el fallo de la Corte que invalida la reforma electoral? 2020-11-23
• A dos años del gobierno de la 4T en Veracruz 2020-11-15
• ¿En verdad de acabó la corrupción en Veracruz? 2019-11-19
• La interminable curva de aprendizaje 2019-10-21
• Información ciudadana y debate público 2019-08-06
• La sujeción de los órganos autónomos 2019-07-09
• La corrupción, el origen de nuestros males 2019-06-16
• ¿Debemos acostumbrarnos a convivir con la violencia criminal? 2019-03-18
• El nepotismo y la captura de los puestos públicos en Veracruz 2019-03-05
• Llegó la hora de la verdad para Cuitláhuac García 2018-11-30
• El final se acerca ya 2018-09-17
• El cambio de gobierno y el combate a la corrupción 2018-07-29
• El fin del régimen y la madurez democrática 2018-07-06
• Esa loca pasión por el fútbol 2018-06-19
• Este arroz ya está a punto 2018-06-12
• La libertad de expresión es de quien la trabaja 2018-06-07
• ¿Tendrá impacto electoral el caso Karime? 2018-05-28
• Las campañas de odio 2018-05-16
• Jóvenes víctimas y victimarios: la tragedia que no se quiere ver 2018-04-27
• El clavo ardiente de los debates 2018-04-20
• No más tolerancia social a los corruptos 2018-04-17
• Sergio Pitol domó a la divina garza 2018-04-13
• El derroche electoral 2018-04-09
• El ensayo para la elección de gobernador en Veracruz 2018-03-20
• La subordinación de los órganos autónomos 2018-03-12
• El empoderamiento de las mujeres 2018-03-08
• Anaya y la estrategia fallida del PRI 2018-03-01
• El fin de las ideologías y la crisis de los partidos políticos 2018-02-25
• La guerra electoral 2018-02-11
• El poder muestra al hombre 2018-01-29
• La contraproducente guerra sucia 2018-01-22
• El Veracruz que merecemos 2018-01-07
> Directorio     > Quiénes somos
® Gobernantes.com Derechos Reservados 2010