Diputados morenistas que ahora votarán paso de Guardia Nacional a Ejército se oponían a la militarización

jueves 19 de septiembre de 2024

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Diputados morenistas que ahora votarán paso de Guardia Nacional a Ejército se oponían a la militarización.

Legisladores que en su momento señalaron la militarización como violatoria de derechos humanos integran ahora la bancada de Morena que respalda que el Ejército controle a la Guardia Nacional

Jueves 19 de Septiembre de 2024

Por: animalpolitico.com

Foto: X.

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Ciudad de México.- El coordinador de los diputados de Morena, Ricardo Monreal, el aún líder del partido, Mario Delgado, y diputadas y diputados de la actual bancada guinda alertaron en el pasado sobre la militarización, pero ahora respaldan la iniciativa, prevista para discutirse este jueves, para que la Guardia Nacional esté bajo mando total de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Monreal incluso aseguró en entrevista con medios que las Fuerzas Armadas son “indispensables para lograr la tranquilidad y la estabilidad social en México”, aunque antes de que Morena llegara a la Presidencia mostró su desacuerdo con seguir apostando por el Ejército en tareas de seguridad pública.

“Locura es seguir desangrando al país con una estrategia fallida de militarización que ha demostrado su inoperancia. Sensatez es ensayar otras políticas de seguridad para pacificar y reconciliar a la nación mexicana, como la propuesta por @lopezobrador_”, publicó el 5 de diciembre de 2017 en sus redes sociales.

Incluso, en mayo de 2019 Monreal aseguró que el Senado modificó 70% de la iniciativa de ley que regirá a la Guardia Nacional para garantizar que sea civil y no militar.

“La Guardia Nacional será civil. No hay forma de que mantenga o se piense en la militarización. No hay ninguna duda de eso. Se profundiza el carácter civil, se profundiza la disciplina judicial y se garantiza el mando civil sobre todos los integrantes de la Guardia”, afirmó en conferencia de prensa.

Meses antes, en febrero de 2017, afirmó que la Guardia Nacional iba combinar características del Ejército y la policía. Es decir, que no iba a ser completamente militar.

“La #GuardiaNacional será una fuerza intermedia entre el Ejército y las unidades policiales, que combina características de ambos para brindar seguridad y confianza a la ciudadanía”, publicó en X.

¿A qué se oponían y qué defienden ahora?
En diciembre de 2017, en el último año del sexenio del priista Enrique Peña Nieto, las dos Cámaras del Congreso aprobaron la Ley de Seguridad Interior, la cual era un conjunto de normas para regular el uso de las Fuerzas Armadas en el combate a la delincuencia, aunque finalmente fue declarada inconstitucional por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

En aquel entonces, el senador Mario Delgado, próximo secretario de Educación Pública y aún dirigente de Morena, publicó una fotografía en contra de la Ley de Seguridad Interior con la frase: “No a la militarización del país”.

“Al gobierno de Peña le resultó mejor la militarización del país que la despenalización del #cannabis”, publicó Delgado en X.

También en diciembre de 2017, la ahora legisladora federal Dolores Padierna publicó que votó en contra de la Ley de Seguridad Interior porque confirmaba la militarización del país, engañando a la ciudadanía.

“#LeyDeSeguridadInterior, no alienta la democratización, sino la militarización del país. Es una clara claudicación del Estado de derecho”, publicó Padierna en X el 6 de diciembre de 2017.

“Ley de Seguridad legaliza militarización y viola derechos humanos, alerta Morena”, publicó en febrero de ese año en X el actual diputado federal morenista Alfonso Ramirez Cuéllar.

Con la reforma que promovió el presidente Andrés Manuel López Obrador, siete años después, de nueva cuenta se apuesta porque las Fuerzas Armadas se encarguen de la seguridad pública, al dejar a la Guardia Nacional en manos de la Sedena con reformas a 12 artículos constitucionales, entre los cuales está el 21, que dejaría a esa corporación como fuerza permanente.

“La federación contará con la Guardia Nacional, fuerza de seguridad pública, profesional, de carácter permanente e integrada por personal de origen militar y marino con formación policial, dependiente de la secretaría del ramo de defensa nacional para ejecutar la Estrategia Nacional de Seguridad Pública”, se lee en el dictamen.

Incluso se plantea la eliminación del artículo 129 constitucional, que establece que en tiempo de paz ninguna autoridad militar pueda ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar.

“La reforma busca convertir a la Guardia Nacional en una de las cuatro instituciones que integran la fuerza armada permanente. O sea, sería el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea y ahora la Guardia Nacional”, explicó Estefanía Vela Barba, directora Ejecutiva de Intersecta, en un Space en X.

“La Guardia Nacional sería una institución militar, estaría adentro de la Sedena pero de cualquier manera se dedicaría a la seguridad pública, entonces a nivel federal ya no habría una policía civil, sólo tendríamos una institución militar y esa institución militar se dedicaría a la seguridad pública y dentro de lo que haría también sería investigar delitos”, agregó.

El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez advirtió que la reforma constitucional en materia de Guardia Nacional será un paso sin retorno hacia la militarización.

“El aumento del #PoderMilitar que generará esta reforma es innegable. Va más allá de la #GuardiaNacional sin que se estén diseñando controles civiles externos y extraordinarios como dispone la @CorteIDH”, publicó en X el Centro ProDH.

Además, en un informe de la Asamblea General de Naciones Unidas, el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria expresó su preocupación ya que la adopción de esta iniciativa podría exacerbar las violaciones de derechos humanos relacionadas con la Guardia Nacional.

En su momento, el ahora diputado federal morenista Vidal Llerenas publicó en X un video en el que criticó “dar un poder excesivo que no se requiere a los militares” y habló de la necesidad de “policías auténticas”. Sin embargo, la reforma en materia de Guardia Nacional prevé la desaparición total de la ya de por sí extinta Policía Federal, y un mando y estructura militar para la Guardia.

Durante su sexenio el presidente López Obrador le transfirió a Defensa Nacional un nivel récord de funciones que antes correspondían a civiles, como lo documenta el informe ‘Transferencia de Facultades de las Fuerzas Armadas 2018 – 2020’ de México Unido Contra la Delincuencia (MUCD).

Sobre por qué transferir la Guardia Nacional a la Sedena, López Obrador sostiene en la iniciativa que durante la llamada “guerra contra el narcotráfico” la corrupción y la impunidad entre grupos criminales y autoridades llegó a estructuras gubernamentales como la Secretaría de Seguridad Pública, la Policía Federal y la entonces Procuraduría General de la República.

Otro de sus argumentos es que la Guardia Nacional debe contar con dinámicas de operación similares a las del Ejército.

“Debe destacarse que la Secretaría de la Defensa Nacional, si bien está a cargo del Ejército y la Fuerza Aérea, también es una dependencia de la administración pública federal que bien puede hacerse cargo de la administración y control operativo de la Guardia Nacional, dado que, por las funciones que esta desempeña se requiere de un sistema administrativo y operativo similar al del Ejército”, argumenta en su propuesta.

Por: Luz Rangel