Penal de Topo Chico, testigo de historias de violencia. | ||||||
El penal de Topo Chico, escenario de numerosos hechos violentos, cerrará sus puertas el próximo 30 de septiembre; autoridades asegura que ya es inoperable | ||||||
Sábado 28 de Septiembre de 2019 | ||||||
Por: | ||||||
![]() |
||||||
El Penal de Topo Chico cerrará sus puertas para dejar detrás de si historias de masacres, enfrentamientos entre carteles de la droga, al interior del centro penitenciario, y las contrastantes condiciones en que, en algún momento, vivían los reclusos, algunos entre privilegios y otros en condiciones infrahumanas. Previo a que el gobierno estatal proceda a su cierre con una ceremonia encabezada por el gobernador Jaime Rodríguez Calderón y en la que estarán presentes los últimos 150 internos que verán cerradas las rejas de este penal construido en 1943, Grupo Imagen tuvo acceso a un recorrido por sus instalaciones. En el mismo se pudo constatar cómo hasta cuatro reos dormían en el suelo en colchonetas, en un espacio de unos tres metros por dos; se bañaban en regaderas comunitarias, convivían con la suciedad y por las noches se espantaban enormes ratas que no los dejaban conciliar el sueño. Las condiciones precarias del centro, que ya lo hacían inoperante, aunado a la estrategia de reingeniería penitenciaria, que permitió al gobierno retomar el control de los penales estatales, fue lo que determinó el fin de la historia del Penal de Topo Chico, inaugurado durante el gobierno del General Bonifacio Salinas Leal. Eduardo Guerrero Durán, asesor de seguridad penitenciaria del Gobierno estatal desde noviembre del 2018 indicó que se tomó la decisión del cierre porque ya era más caro rehabilitarlo que edificar uno y medio. “Topo Chico fue un lugar de gran violencia dentro del sistema penitenciario nacional con condiciones, muy deplorables y este Penal va a dejar de funcionar como tal después de 76 años”, señaló. El hombre, quien resguardo que Joaquín “El Chapo” Guzmán no escapara la última vez que fue detenido por autoridades mexicanas, aclaró que el Topo se cierra no porque sea un penal ingobernable sino porque ya es inoperante. “Sale más barato construir uno y medio nuevo que restaurarlo”, aseveró. La noche del viernes se realizó otro traslado de cerca de 700 internos que fueron al espacio en donde estarán en el Penal de Apodaca, ubicados en los nuevos módulos que se acondicionaron y lucen relucientes para sus nuevos inquilinos, con celdas con lugar para cuatro reclusos, una especie de desayunador con dos bancos de acero inoxidable y una taza de baño con las mismas características. HISTORIAS DE TERROR Diversos fueron los hechos sangrientos que atestiguaron, los muros, patios, celdas y hasta oficinas del Penal del Topo Chico. Uno de ellos ocurrió en 1980 cuando dos reclusos identificados como Carlos López Atencio, alias “El Cubano” y Rodrigo Alcalá López, “El huevo”, lograron desarmar a un celador y luego mataron al director del reclusorio Alfonso Domene Flor Millán y a su chofer además de que mantuvieron como rehenes a tres secretarias. Aunque la muerte del Capitán Domene fue al instante, los internos, y otros más que se sumaron a la revuelta, fingieron que estaba con vida para negociar su salida del penal, pero como liberaron a las tres secretarias estas notificaron que el director estaba muerto y se procedió a la intervención. El resultado fue que todos los internos que participaron en los hechos fueron abatidos. Otro derramamiento de sangre se registró, la madrugada del 11 de febrero del 2016 cuando grupos antagonistas encabezados por Jorge Iván Hernández “El Credo” y Juan Pedro Saldívar, alias “el Z27” se enfrentaron de forma cruenta por el control interno del Penal con un saldo de 49 internos fallecidos y 12 heridos. Esa mascare dejó al descubierto el autocontrol del centro penitenciario, los lujos y privilegios con que algunos jefes criminales vivían al interior del penal, con complicidad de las autoridades. Se desmantelaron entonces instalaciones en las que había un jacuzzi, sillones, televisores, mosaicos en los pisos, un bar con cocina, aires acondicionados y hasta enormes altares para rendir culto a la Santa Muerte. En el ambulatorio llegó a existir una discoteca. HUÉSPEDES MEMORABLES Millones de personas pasaron por el Penal del Topo Chico en castigo por haber infringido la ley, pero el centro penitenciario tuvo sus reclusos famosos y los mismos fueron desde un ex gobernador, un banquero y deportistas, hasta al médico que inspiró el personaje de Hannibal Lecter. En 1959 un crimen conmocionó a la entonces conservadora ciudad de Monterrey. El homicidio involucraba al doctor Alfredo Ballí Treviño, quien mató y descuartizó a un joven estudiante de medicina, Jesús Castillo Rangel con quien, presuntamente, mantenía una relación amorosa. Antes de ser ejecutado por su condena a pena de muerte, la última que se dictó en México en 1961, fue internado en el Penal de Topo Chico en donde conoció al periodista Thomas Harris, quien 25 años después escribiría “El Silencio de los Inocentes”, inspirado en Ballí Treviño. En años más recientes, el banquero Jorge Lankenau Rocha vivía en la opulencia hasta que fue detenido en 1997 por cargos de fraude y evasión de impuestos para el desplazamiento de 179 millones de dólares a las Islas Caimán y Paraguay. Tras un arresto domiciliario ingresó al Topo Chico en noviembre de 1997 para salir ocho años después. Lankenau Rocha fue presidente del Club de Futbol Monterrey desde 1991 hasta que fue encarcelado. Miguel Nazar Haro, ex director de la Federal de Seguridad también estuvo preso en ese centro penitenciario acusado del secuestro y desaparición de integrantes de la Liga Comunista 23 de septiembre, entre ellos, Jesús Piedra Ibarra, hijo de Rosario Ibarra de Piedra. Fue liberado por su edad para terminar sus últimos días en casa. Rodrigo Medina, ex gobernador de Nuevo León tuvo una breve estancia de 19 horas en el Penal de Topo Chico acusado de peculado y daño al patrimonio estatal, sin embargo, una suspensión provisional de amparo le permitió recuperar su libertad. Acusado de haber violado a su propia sobrina, el ex futbolista José de Jesús Arellano Alcócer, mejor conocido como “el Cabrito” Arellano fue internado en el mencionado centro penitenciario, no obstante, fue puesto en libertad porque no se encontraron elementos en su contra. |
||||||
|
||||||
Nos interesa tu opinión |
||||||
![]() |
||||||
> Directorio > Quiénes somos |
® Gobernantes.com Derechos Reservados 2016 |