Dicen en el rancho (y en todas partes) que a la patrona no se le rezonga, porque te puede ir mal.
Y más cuando está defendiendo a quien fue el real operador electoral de Morena para los procesos electorales, el mismo que es su “representante” para los tratos con los ayuntamientos, ese que recomendó a compadres y amigos y que trató con compañías transnacionales para la construcción de Dos Bocas, al que mencionan que está en los tratos con dependencias del gobierno federal, pero sin aparecer en la foto ni en en nada.
El mismo que le dijo a los ganaderos que sería el contacto directo con la gobernadora y a quien Rocío Nahle anunció que actuaría en ese campo recién iniciado su gobierno.
O sea, a José Luis Peña Peña, su esposo.
Vaya pues, a la patrona no se le rezonga, y menos cuando defiende a quien podría ser el real causante de la baja en la votación de Morena en el estado.
Peña quiere ser el Andy veracruzano, actuando sin reflectores, desde las sombras.
Lo suyo fue durante el proceso electoral mover piezas, gestionar intereses, intervenir candidaturas.
Una “investidura” informal que incomoda incluso dentro del oficialismo, pero a la que se le acataba todo, porque no hacerle caso era exponerse a la malquerencia de la gobernadora Nahle.
Y no lo digo yo, lo dicen desde el interior de ese partido y desde los aliados.
Ese alguien a quien mencionan que era el que palomeaba candidaturas hasta de regidores, es Pepe Peña, como lo llaman comúnmente.
Por cierto, ¿así como Andy ya no quiere que le digan Andy, Pepe Peña pedirá que ya no le digan Pepe Peña?
Por toda esa intervención que tuvo, es por eso que desde el mismo gabinete de la gobernadora Rocío Nahle surgen versiones que acusan a José Luis Peña por deficiencias en la operación electoral en el estado.
No sólo “se le cayó” Poza Rica, que era un municipio en el que tiene un interés muy personal, si no también las recomendaciones “especiales” de la gobernadora, como Boca del Río y Alvarado.
Era el enlace directo entre el poder estatal y los candidatos de Morena para ambos municipios. Por esto tanto Bertha Ahued como Hipólito Deschamps se sentían tan confiados del triunfo.
Es por eso que Rocío Nahle reaccionó con enojo contenido cuando empezó a hablar de la cuestión electoral este lunes, porque no era responder por la caída “del partido”, ni por los errores de Esteban Ramirez Zepeta, ni por otras causas, si no por lo que Pepe Peña no consiguió.
Más que una explicación, eran los pretextos de porque Morena perdió en varios municipios contra Movimiento Ciudadano.
Es por eso que se fue contra Jorge Álvarez Máynez, el dirigente nacional de Movimiento Ciudadano, porque le ganaron una posición emblemática a José Luis Peña, el ayuntamiento de Poza Rica.
Rocío Nahle no lo dijo, ni lo dirá, pero existen versiones de que desde su gobierno financiaron a Movimiento Ciudadano para que fuera la oposición creciente, el partido que hundiera al PRI y al PAN.
Pero nunca, nunca pensaron que fuera a crecer tanto que les pelease triunfos a ellos, a Rocío Nahle y a Pepe Peña, sobre todo en lo que consideraban sus bastiones, como Poza Rica.
Peña Peña por la designación de candidatos por todo el estado, también es responsable directo o indirecto de otras derrotas que sufrió Morena y de la baja en las votaciones para este partido.
De hecho, en el PT mencionan por lo bajo que él fue quien dio la cara para negarles el encabezar más candidaturas en las alianzas y más posiciones edilicias.
Dicen que dijo del PT, “sin nosotros, no son nada”.
Eso dicen.
Por eso es que la gobernadora buscó a quien culpar por las derrotas a Morena y la disminución en los votos para este partido.
No buscaba quien se las hizo, si no quien se las pagase, y a quien encontró primero fue a Movimiento Ciudadano.
Este lunes, poco después de las 11 de la mañana Rocío Nahle empezó su conferencia de prensa y a los pocos minutos se le fue encima a Jorge Álvarez Máynez, el dirigente nacional de Movimiento Ciudadano, que todo el fin de semana se la pasó gritando “fraude-fraude” por la elección de Poza Rica, desde la comodidad de sus redes sociales.
Rocío Nahle comenzó queriendo aparentar tranquilidad y calma.
Serenidad y paciencia, pues.
“Yo ya aprendí, y además es parte de lo que debo de hacer, de esquivar y no caer en provocaciones, pues con personajes que son... cómo te los diré para decir la palabra correcta... pues… pues que son simuladores”.
Pero le ganó el sentimiento.
Le surgió el coraje porque Pepe Peña salió lastimado en estas elecciones.
Y al que encontró enfrente, para que se las pague, aunque no haya hecho todas, fue a Álvarez Maynez.
Lo llamó “farsante” una y otra vez.
Lo acusó de que en las elecciones postularon a delincuentes, que sus operadores políticos fueron expresidiarios, a los que conoció en el club de presidiarios.
Con la voz contenida, pero con los movimientos corporales en corto, esos que denotan que se hacen esfuerzos para no estallar, agregó: “yo no sé qué pasó, pero ahí (en el club de presidiarios) ya los conocía. Pero eso es lo que son”.
Y el también zacatecano (ah, porque Jorge Álvez nació en la ciudad de Zacatecas el 8 de julio de 1985), siempre presto a meterse en la discusión que le de notoriedad en redes sociales, dejó pasar una hora, dos horas, cuatro horas, seis horas… y no respondió.
Silencio en sus redes.
Casi-casi se podía oir nada más el zumbido leve de la corriente eléctrica pasando por sus cuentas de redes sociales mientras no se movían.
¿Lo habrán jaqueado?.
Quién sabe, porque nada ha dicho siendo casi las 17 horas del lunes 9 de junio del año 2025.
Iban 8 minutos con 25 segundos de la conferencia de prensa de Rocío Nahle, cuando se arrancó contra Álvarez Máynez y Movimiento Ciudadano.
De los dirigentes estatales, Luis Carbonell y Sergio Gil, ni se acordó (o tal vez ni le importan).
¿Habrá quedado más tranquila?, ¿habrá sentido que justificó lo suficiente el porque a Pepe Peña le fue mal en la operación electoral que coordinó?
¿Habrá penado en algún momento que hubo terrenales que votaron contra Morena por los malos gobiernos que ha tenido y los malos candidatos que postularon, y que por eso votaron por el que consideraron el menos malo?
¿Seguirá su gobierno apoyando a Movimiento Ciudadano después de la catarsis?
Tal vez por eso Álvarez Máynez se mantuvo en silencio, junto con los demás dirigentes nacionales y estatales de MC, para que ese recurso no desaparezca y lo puedan seguir usufructuando.
Bueno, al menos es lo que dicen, que de Palacio de Gobierno salió mucho dinero para ese partido.
Si usted quiere ver el video de como se descarga la gobernadora contra MC y Álvarez Máynez por varias de las derrotas que sufrió Morena (y Pepe Peña, muy probablemente) está en https://youtu.be/zl_XDVJqjEU.
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