¿Y si en lugar de chelas, vienen por el agua?
—Chopenjawer
Este lunes, en la conferencia “mañanera”, el presidente Andrés Manuel López Obrador comentó sobre la contratación de 500 médicos cubanos (menos lo que probablemente van a desertar y pelarse pa’l gabacho) para atender en comunidades alejadas de México como Tlapa, Guerrero, en la sierra de ese estado.
El mandatario anunció lo anterior y abundó que el problema era que los médicos mexicanos no querían vivir en Tlapa.
Si lo anterior es verdad, y no es mero asunto de negocio (se sabe que Cuba gana como país a través de la contratación de sus médicos, sumado a que le van a comprar vacunas contra Covid), la verdad le asiste a López Obrador.
Desde hace unos meses, un amigo tuvo la necesidad de movilizarse a Villahermosa, Tabasco, desde Minatitlán, Veracruz, debido a que no hay especialistas en el hospital de Pemex para atenderlo por un problema de salud. De hecho, desde hace rato hay áreas especializadas que no están siendo atendidas allí por la falta de personal médico, por lo que son canalizadas a otros hospitales cercanos como en el caso del ubicado en la capital del pozol y el pejelagarto.
¿Y por qué no hay especialistas? Porque nadie quiere vivir en Minatitlán.
Aparte del calor infernal que se siente bastante fuerte por estas fechas, esta histórica petrolera ciudad —Coatzacoalcos también— tiene la imagen de ser un lugar inseguro por constantes extorsiones y secuestros contra médicos. Este ha sido el principal motivo por el cual los residentes prefieren buscar otras opciones, otros lugares.
También hay qué decirlo: fuera de la comida y la banda que es muy chida, la ciudad no tiene atractivo alguno. No es un lugar donde uno pudiera decir: “ahí me voy a retirar el resto de mis días para pasarla tranquilo”.
Lo anterior es curioso, porque son los estudiantes de medicina y educación los que constantemente hacen protestas para solicitar plazas en Salud o el magisterio; así nada más para que se les otorguen sin saberse si están aptos para tenerlas: sólo por el hecho de haber supuestamente estudiado la carrera.
Pero también es harto conocido (afortunadamente hay honrosas excepciones) que muchos piden lugares cómodos, de buen clima, cerca de ciudades grandes, con atractivo turístico. La mayoría busca el cambio de adscripción cuando les toca en zonas alejadas, rurales.
A lo mejor, en una de esas, hasta resulta que llegan cubanos al Hospital de Pemex de Minatitlán, por aquello de que nadie quiere irse a mi rancho.
Siempre será criticado (más en estos tiempos polarizados de la Cuarta Transformeishion) el que vengan médicos cubanos a México. En el siglo pasado, en los gobiernos del priato, siempre se alimentó el mito de que la medicina de ese país era una de las mejores del mundo.
Al paso de los años, ese mito se ha ido esclareciendo: ni son tan fregones como siempre se presumió, ni tampoco son tan malos.
Hace algunos años, un familiar especializado en Pediatría estuvo en un congreso de medicina en Cuba y me platicó sus impresiones sobre la realidad que vio: son buenos en medicina preventiva, pero es debido a sus circunstancias que persisten hasta el día de hoy.
Los cubanos no padecen (o son muy pocos casos) de hipertensión o diabetes, debido a que no tienen los excesos que sí tienen los mexicanos. Aparte de que el estado les obliga al servicio militar o a la práctica de un deporte o al baile.
El cubano tampoco tiene acceso ilimitado a la sal o a la azúcar (por el famoso raciocinio) como en México sí la hay; menos consumen la carne roja o la tortilla, pues su dieta es más basada en tubérculos y pan. Incluso se puede decir que no son muy afectos al cerdo, pues el famoso pan con lechón hasta parece que no es un alimento de sus preferidos, y optan mejor por el pollo y el pescado.
Y es que en plática con cubanos, estos comentaban que esas enfermedades eran una carga para el estado (no hay consultorios o clínicas privadas, pues todos tienen acceso a los servicios médicos por igual) que se podrían evitar por parte del ciudadano común cuidando su alimentación y haciendo alguna actividad física.
En resumen, los cubanos, cubanas, “cubanes”, son personas sanas, beneficiadas irónicamente por la escasez y por el régimen que los obliga a activarse físicamente.
Otro de los mitos es que los cubanos tienen una cura milagrosa contra el vitiligo, pero puedo decirle que este padecimiento lo tengo desde hace años y su tratamiento de alcohol con placenta no fue precisamente algo que retrasara, desvaneciera o desapareciera las manchas.
Quien comenta también del asunto es el conocido médico Benito Navarrete, desde Ciudad Isla: “Ni de broma un especialista formado en Cuba es mejor que uno en México, tampoco en medicina general. En lo único que son más organizados es en Salud Pública. Lo único bueno de que vengan a México es que acá les enseñaremos, lo malo es que lo que aprendan acá difícilmente lo podrán aplicar en la Isla con las carencias atroces que tienen. Que la medicina cubana es la mejor es solo un mito”.
Y mire, cuando nos tocó estar en las exequias de Fidel Castro, por la televisión cubana veíamos cómo echaban la culpa de la epidemia del dengue a un ataque bacteriológico del imperialismo.
Que podrán ayudar los cubanos: sí, por lo menos a cubrir las plazas que los mexicanos no quieren. Que puedan ser mejores médicos que los nuestros: tal vez, todo depende de la preparación. Que son el ejemplo de medicina mundial: no, eso fue una de las tantas ideas románticas que se abonaron al paso de los años con la revolución de los sesenta con la efigie del Ché Guevara.
NOTA PARA PEGAR EN EL REFRI: Y hablando de inseguridad (precisamente en la región donde no quieren ir los médicos por temor a la violencia) este lunes fueron ejecutadas las periodistas Yesenia Mollinedo y Johana García Olivera… Los hechos ocurrieron en el Oxxo que se encuentra en la primera cuadra de la colonia Cerro Alto, ya en territorio de Cosoleacaque, cerca de las 3 de la tarde… En la escena del crimen hay una cámara de vigilancia que puede esclarecer todo en las próximas horas. Muy triste día para el gremio periodístico. Descansen en paz…
OTRA NOTA: Justo unos minutos antes de la ejecución de las periodistas, fue detenido un comando de al menos 4 personas armadas, que pretendían supuestamente asaltar una sucursal bancaria en Minatitlán. Sobre esto también trascendió que eran pistoleros o escoltas de un empresario actualmente detenido en un penal federal.
LA ÚLTIMA PORQUE SE ACABARON LAS GUINNESS: Este mismo lunes fue detenido en Xalapa por la Fiscalía General de la República (FGR) una persona identificada como Rafael Cruz Sosa, identificado como presunto defraudador del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos Sociedad Nacional de Crédito (Banobras) por su probable responsabilidad en el delito de fraude por más de mil doscientos millones de pesos… De acuerdo a información del portal Versiones: “según la indagatoria, en el año 2012, el inculpado se asoció con la empresa Rotary Drillrigs Internacional S.A. de C.V. (RODISA) para proporcionar datos falsos a fin de obtener un crédito mediante dos contratos, a través de los cuales Pemex Exploración y Producción acordó con Rotary Oilfiel Drilling Equipment International Inc., Procesos Manufacturing Corp y Rotary Drillrigs International S.A. de C.V, realizar perforaciones de pozos petroleros y producción, dando la línea de crédito en el Banco Invex como Fiduciario. Con esta acción se causó un perjuicio patrimonial para Banobras”… Rafael Cruz Sosa (de acuerdo a Versiones) “llevaba siete años prófugo de la justicia y es el tercero que ha sido detenido en este asunto, ya que antes fueron capturados Jorge Daniel Salas Hernández y José Antonio Álvarez del Castillo Gómez, dueño y asesor financiero de Rodisa, respectivamente. Salas fue sentenciado a 8 años de prisión y Álvarez del Castillo logró su libertad, aunque posteriormente se convirtió de nueva cuenta en evadido de la justicia… Rodisa fue constituida el 6 de julio de 2011 ante la Notaría 42 de Alvarado, Veracruz, pero su domicilio se localiza en Houston, Texas. En menos de un año, el 17 de mayo de 2012, ganó dos contratos en Pemex Exploración y Producción por 203.5 millones de dólares para proveer cinco equipos de perforación terrestre de pozos y brindar asistencia técnica hasta 2017. La FGR sostiene que, para financiar estos contratos, la compañía solicitó y consiguió un crédito de Banobras por 91.4 millones de dólares, presentando como garantía dos inmuebles con avalúos falsos, uno en Coatzacoalcos y otro en Cosoleacaque, Veracruz, con un valor inflado que sólo alcanzaba los 247 millones de pesos. Dichos bienes son propiedad de Victoria Velázquez Jiménez, quien fue la garante hipotecaria del crédito de Banobras y es esposa del citado Salas Hernández. |
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