“La verdad es para todos”. Pitágoras (569 – 475)
Todos aquellos que tienen necesidad de respaldar sus dichos, mostrando testimonios; generalmente es porque es falso lo que afirman. Esos doctores que han descubierto medicinas maravillosas y ¡LAS VENDEN! -con oferta claro- y presentan ex pacientes que relatan su espectacular curación; es un ejemplo muy actual...
No sin razón se argumenta que de algo tiene que vivir la gente. Y si su descubrimiento llevó tiempo y estudio, es justo que se le recompense con dinero...
También de moda están las plataformas que con una “inversión” de 5 mil pesos, pueden dejar de trabajar el resto de sus vidas. Y la gente lo creé; porque no razona. Los milagros y la razón no se llevan. Quién creé en milagros y los espera -lo llaman fe- no evoluciona. En la vida, son los fracasos, no los triunfos, los que más nos enseñan...
Pero que quede claro. Una cosa es que en esta vida hay que sufrir para merecer; y otra muy distinta, es que en esta vida hay que esforzarse para triunfar. Y aunque la vida es la misma para todos; no todos ven la vida de la misma manera. Y todo depende del estado de salud...
El que está sano, ve la vida con alegría. Lo contrario sucede con los enfermos. Nada les parece...
Pero regresemos con las curaciones milagrosas, que, en este prostituido mundo, donde casi todo tiene un precio; el problema radica, en que estamos tan mal, que la idea generalizada es, que lo que no cuesta, no sirve...
A principios de los 90s, allá en Querétaro, se dio a conocer, que unos animales estaban enfermos -nunca se especificó de qué- pero que se habían curado al beber agua de un pozo en la Hacienda de El Tlacote...
El rumor comenzó a crecer y durante el 91, el 92 y el 93, miles de personas fueron a buscar el agua que, decían, curaba todo tipo de enfermedades. Muchos ciertamente se curaban de distintos y muy variados padecimientos. Decían que era la sugestión. Pero la mayoría no, en veces sentían alivio, pero los achaques regresaban. Lo que es más que lógico. Si vuelven a comer lo mismo que comían, se van a volver a enfermar...
Al agotarse el pozo, se terminó el bum. Y los gastos que se habían hecho para proporcionar el agua, fueron consumiendo a la hacienda, convertida en empresa; y finalmente todo quedó en el olvido y dio paso a la leyenda...
Pero fue cierto, el agua del pozo de El Tlacote, efectivamente curaba cualquier tipo de enfermedades. Los animales no podían ser sugestionados. Y se curaban. Lo mejor del caso, fue que, al agotarse el pozo, recurrieron a otro pozo dentro de la misma propiedad ¡y también curaba!...
Finalmente, nada nuevo...
Los animales de todo el mundo, sin importar la especie o la edad, se curan bebiendo agua. Pero...
Entonces por qué muchos, la mayoría, no se curaban y los síntomas de sus enfermedades les regresaban...
Pues porque no hacían completa la tarea. Los animales no nada más toman agua, se purgan. Comen pastos para limpiar los intestinos...
El sistema digestivo de los humanos es muy largo, entre 8 y 9 metros dependiendo. Por lo que en promedio el hombre almacena entre 4 y 5 kilogramos de materia en proceso de descomposición dentro de ellos; o más, también dependiendo...
Y si se come carne, de cualquier tipo, esta se pudre al estar a 37 grados centígrados, emanando gases que son absorbidos por los vellos intestinales y van a dar directamente a la sangre. Que al circular por el organismo lleva las toxinas a todas partes, incluyendo al cerebro...
Para esto, cabe aclarar que, si solo se toma agua, pueden pasar 10 o más días, en que la persona va a seguir yendo al baño a evacuar heces fecales. Por eso, durante un ayuno, que es lo que hacen los animales, es pertinente lavar los intestinos...
Sin dejar de mencionar, que la diferencia entre los gorilas y los orangutanes, con los chimpancés; es que los dos primeros son vegetarianos y totalmente pacíficos. No así los terceros que se caracterizan por ser en extremo violentos, hacen la guerra y se comen a sus víctimas, es decir, comen carne...
Citar oportuno, que los pueblos vegetarianos no son violentos...
Para concluir, la mejor medicina del mudo que cura cualquier tipo de enfermedades, ES GRATIS. El agua, literalmente es la vida...
Y los que no se curaron con el agua de El Tlacote, es porque pensaron que con una garrafa era suficiente. Además de que nadie les dijo que había que lavar los intestinos hasta que el agua saliera limpia. Sin soslayar que, sí vuelven a comer lo mismo, seguro que volverán a enfermarse. Así de simple...
Todo esto viene a colación, porque me llegó un video de “Chico Xavier”, un médium brasileño ya fallecido, que escribió 450 libros sobre espiritismo, imbuido en esas creencias del espíritu $anto y todas esas cosas no declaró, sentenció, “el espíritu es la esencia inmaterial e inmortal del ser humano, en constante evolución y progresión a través de la reencarnación”...
Y da una explicación detallada de lo que sucede con el espíritu después de la muerte. ¿A dónde van; quién los recibe, qué pasa con ellos, etc. etc. etc.” Y lo mejor de todo, es que hay quienes le creen; cuando el escritor y médium, debe de haber fumado de la mala, porque no tiene ni idea de lo que es un espíritu...
Y voy a citar, no mí opinión, que no sé ni lo que va a pasar mañana; sino la de alguien respetable. Pitágoras. “Todo cuanto existe en El Universo tiene padre y madre. El espíritu es la resultante de la unión del cuerpo con el alma”...
Cuando el hombre muere, el alma regresa por donde vino, El Sol; que, cuando menos en esta Tierra, es el que da la vida. El cuerpo, de una u otra forma, también se regresa a La Tierra, que es de dónde vino. Y el espíritu permanecerá vivo mientras haya quien se acuerde de él...
El espíritu de Elvis Presley (1935 - 1977) está presente. Lo mismo que el de Adolfo Hitler (1889 - ¿?) por poner sólo dos ejemplos de entre los miles que debe de haber; y entre los millones de espíritus que ya desaparecieron...
En fin, hay gente inteligente que todavía no se ha dado cuenta -o no acepta- que los seres humanos somos parásitos de La Madre Tierra. Y que, luego entonces, su Dios debe de ser un gran parásito.
De última hora...
Ya se esperaba. Israel ataca a Irán. Esta vez se esperan las no menos previstas represalias.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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