Ya había comentado con mis tres amables lectores, que Marco Rubio el Secretario de Estado norteamericano, no venía a sentar las bases de la cooperación, que venía a dictar las condiciones y que a partir de su visita las cosas cambiarían. Pero ¡nada! Quién sabe qué misterioso secreto guarda la presidente para tener a los hombres embelesados, idiotizados, también cabría, para no darse cuenta del desgarriate de gobierno que tenemos...
Con una bola de rateros e hipócritas que pregonan la austeridad republicana -cuando ya no hay ni República; y eso es gravísimo- mientras estos cínicos se dan vida de reyes CON NUESTRO DINERO. Hasta antes de llegar a esos cargos que acaban de tomar, ni siquiera habían escuchado el nombre del restaurante donde ser fueron a tragar estos infelices. Debía de darles vergüenza; pero no tienen...
Pero regresemos con esta Cleopatra moderna; in memoriam de la misteriosa mujer, que algo muy especial debía de tener, para que los hombres más poderosos del Imperio Romano lucharan por ella; porque a la de aquí, nomás la conocen, o sea, a primera vista, como quien dice; la colman de elogios diciendo que es una mujer maravillosa...
Que ya después Trump agregue que les tiene miedo a los cárteles; y que ahora Marco Rubio diga que nadie ha hecho tanto contra la delincuencia como ella; el primero, haciéndole al caballero, que no lo es, sino más bien lo contrario, tiene el pretexto de que se van a meter para protegerla; y el segundo, puede decir que para premiarla y completar el desmantelamiento de los cárteles...
Pero estaba yo seguro de que venía a decirle las medidas que iban a tomar. Pues qué se sepa, nunca han pedido autorización para meterse donde les ha dado la gana. Lo desconcertante, es que esa seducción no la emplea con los de casa, cuando menos para llevarla en paz; pues exhibir sus mal habidas riquezas, es directamente burlarse de ella, que pregona la austeridad cambiando de modelito todos los días; y de todos los mexicanos a los que ya no les alcanza para la comida...
Si le hubieran hecho eso a cualquiera de sus antecesores, ya los habrían despedido. Por menos que eso, López Obrador, el mayor cínico que se haya conocido, corrió a Santiago Nieto, Jefe de la Unidad de Inteligencia contra la corrupción, tachando de escandalosa su boda en Guatemala. Pero aquí, a la presidente se la pasan por el arco del triunfo...
A ver con qué sale ahora. Lo mismo y ratifica que defenderá la soberanía de la Patria. Y que aquí no entrarán tropas yanquis a mancillar nuestro suelo; pero drones; ya es otra cosa. Finalmente, el Himno Nacional, no dice nada al respecto.
Y nos vemos mañana si el Sol me presta vida.
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