Por Omar Zúñiga
A escasos días de que concluya el que quizá ha sido el peor sexenio en la historia de Veracruz (y mire que es mucho decir, pues hemos padecido a un Javier Duarte o al miserable de Miguel Ángel Yunes Linares), la porquería no para de salir de cada piedra que se levante en cualquier lado.
Los Servicios de Salud del estado de Veracruz (Sesver) dependiente de la Secretaría de Salud han sido ancestralmente caja chica de los gobiernos en turno, dada la enorme cantidad de servicios que se subrogan, por el pretexto que usted quiera, desde incapacidad en la operación de determinados equipos, hasta el servicio de mensajería y paquetería especializada en la oficina central de Sesver, así es.
Aquí es cuando el extraordinario idioma que hablamos debe ser utilizado con sabiduría, es decir, saber hablar es saber escribir o redactar con propiedad.
Resulta que de acuerdo al contrato SESVER/DA/C-029/2024, firmado el 1 de enero de este año de Dios y María Santísima 2024, se contrató el “servicio subrogado de mensajería y paquetería especializada EN oficina central de Servicios de Salud de Veracruz”.
Lo que parece un verdadera dilapidación de recursos públicos, pues para repartir paquetes dentro de un edificio y pagar más de 600 mil pesos ($608,850.00 00/100 M.N.) en el lapso que fue de el 1 de enero al 30 de abril próximo pasado, parece un favor para alguien o bien una fuente de financiamiento para algún funcionario.
Este contrato fue asignado por “Adjudicación directa” con recursos provenientes del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA), que según la descripción del Gobierno de la República “es un programa que proporciona recursos financieros a los estados y al Distrito Federal para que puedan prestar servicios de salud a la población”.
Para que puedan negarlo a gusto las autoridades correspondientes, el número de partida es el 31801, pero por si fuera poco, fue asignado a una persona física de nombre Irving Noé, pongámosle N de apellido, para proteger su identidad, aunque se trata de recursos públicos y su nombre aparece en un documento público no testado.
Por eso se presta a pensar que puede ser un favor personal, pues si las matemáticas no mienten, en tres cuatrimestres que tiene el año (no hay más información al respecto, más que la del primer cuatrimestre), el total erogado sería de 1.8 millones de pesos en un año.
Nada despreciable, sobre todo tratándose del Año de Hidalgo, donde los funcionarios del gobierno de Cuitláhuac García se han despachado con la cuchara grande.
Lo que se ha expuesto en este espacio, más todo lo que han revelado compañeros periodistas, dan (damos) por hecho que García Jiménez al término de su ¿gobierno?, ciertamente seguirá dependiendo del erario público, sólo que no detrás de un escritorio en una oficina, sino en una cómoda aunque húmeda y fría, recámara en la congregación de Pacho Viejo… tic, tac.
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Para documentar el optimismo, varias son las voces que a estas alturas les han seguido ofreciendo plazas en diferentes dependencias, como el Cobaev o la misma SEV, con la única condición de que a su benefactor, le toque la mitad del salario nominal, mismo que deberá ser entregado en efectivo el día de pago.
Este convenio no terminará acabándose el sexenio, por el contrario, pues la apuesta de los funcionarios es la continuidad o bien seguir cobrando a través de interpósita persona, pues no es una, ni dos ni diez quienes han aceptado este trato, con tal de llevarse una lana al bolsillo.
¿Qué hay de eso Josefina?, diría A. Puente Rosado.
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Una felicitación a la guapa y competente Madgiel Monge, por su retorno a los micrófonos.
Imaginante se transmite los viernes a las 21:00 horas por la frecuencia de RadioMás y a juzgar por el primer programa que se transmitió el viernes pasado, esta nueva etapa en su carrera resultará todo un éxito. ¡Felicidades!
¡Qué barbaridad!
deprimera.mano2020@gmail.com
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