Por Omar Zúñiga
Este martes 29 de marzo puede ser verdaderamente histórico en la vida parlamentaria de nuestro país, pues es prácticamente un hecho que una iniciativa de gran trascendencia para la vida pública, tanto por el tema de la iniciativa misma, como por el camino que siguió, pueda ser votada.
El asunto es la prohibición de los tráileres que transportan doble remolque por las carreteras mexicanas, que ciertamente trastoca intereses muy poderosos, pero también se pone orden y al mismo tiempo se da cumplimiento a un muy añejo reclamo del entonces TLC hoy TMEC, para que haya piso parejo entre los transportistas gringos y los mexicanos, pero por otro lado, esta iniciativa que pasó a comisiones donde durmió (como todas las iniciativas que se presentaron sobe el tópico) el sueño de los justos, sin embargo, la dueña de la propuesta hizo (ha hecho) su tarea, e hizo efectivo su derecho legislativo de apelar al artículo 184 fracción primera del Reglamento Interno de la Cámara de Diputados y así jalarla para ser votada en el pleno y no caer en la fracción segunda.
Por todo esto, la autora puede anotarse un triunfo institucional, NACIONAL, pero también personal mañana, cuando entre al pleno. Felicidades a la paisana, diputada federal Lorena Piñón, que pésele a quien le pese, está en chinga, dándole brillo a lo opaco, por pequeño que parezca.
Este asunto sin duda la pondrá en otra dimensión y los que no quieren verla, tendrán que voltear o les va a dar un esguince cervical que les va a durar unos seis años.
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Y nuevamente vino a marcar territorio el diputado Sergio Gutiérrez Luna, con la reunión en Cardel con El Potro, líder del movimiento contra el pago de la luz, da nuevamente muestra delo que debe ser un político profesional, reunirse con tirios y troyanos, pero sobre todo, lograr acuerdos.
El Potro es complicado, el tema lo es más, en este gobierno no le hacen caso y Sergio nuevamente se mueve en aguas turbulentas a escasos kilómetros de la capital y el palacio de Gobierno. ¡Órale!
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El jueves pasado, 24 de marzo, Altotonga nuevamente dio de qué hablar y fue para bien…, otra vez. Se realizó el foro dedicado al desarrollo económico de este municipio…, el escenario: una empresa manufacturera, que da empleo a decenas de personas; no habría mejor escenario, dado que el municipio debe su desarrollo en buena medida a esta industria.
Varios puntos a destacar, entre ellos el desarrollo de la marca ciudad, a cargo de la directora de Turismo municipal Paola Domínguez, proyecto que pocos han dimensionado, pero que conlleva muchísimos beneficios, entre ellos recursos extraordinarios para promoción, identidad y por supuesto proyección. Para poner un ejemplo muy claro, la marca MTY que corresponde a Monterrey y es mundialmente conocida como tal o yendo más allá las iniciales NY, y con esto tampoco se busca comparar a estas urbes con Altotonga, absolutamente, sólo ejemplificar y nada más, no sea que vayamos a escuchar al rato “Pancho Poza of mine”…
Pero bueno…, el alcalde Ignacio Nacho Morales reconoció la importancia del sector manufacturero y precisamente uno de los ponentes, el empresario Alí Jiménez fue claro en su posicionamiento y además de agradecer a Nacho por haber volteado a verlos, (pues a pesar de ser pilar de la economía municipal nunca los habían pelado) y tomarlos en cuenta, pidió capacitación técnica, pues a pesar de que actualmente se le da empleo a unas 8 mil personas, durante la pandemia se perdieron unos 4 mil, lo que les ha ocasionado un déficit de mano de obra que resienten en estos momentos, al haber una recuperación incipiente, pero incapaces ya de crecer porque no hay especialización para este trabajo “y hoy, lo que requerimos es mano de obra calificada”, dijo Alí.
Y en esto coincidió el director de Desarrollo Económico Abdiel Caleb Reyes: la apuesta es a la capacitación.
Alí Jiménez dio la muestra de liderazgo.
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Y así como hubo liderazgo impuesto por Nacho y por Alí, la nota discordante la puso el resto de la comuna, al mostrar y demostrar falta de talento y de civilidad política. El ejercicio político es consenso, diálogo y las diferencias que puedan (y deben) existir, pues en la democracia los disensos son normales, lo normal también es consensar, nunca caer en la diatriba o en la grosería. Mi reconocimiento y respeto a la síndica Laura Santillán Moreno, que no merecía la grosería que le hicieron, pero que al final, los que se la perdieron fueron ellos y evidenciaron una inmadurez política de proporciones épicas.
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Y para documentar el optimismo, la misma Lorena Piñón trae a la patria chica este fin de semana al embajador de la República Islámica de Irán, Alireza Ghezili, en una gira que incluye Xalapa, la conurbación Veracruz-Boca del Río y la zona sur del estado, con diferentes actividades desde un concierto de música persa hasta visita al Congreso. Mucha mano izquierda de la diputada veracruzana priista y mucho trabajo, sin distinción de partido.
¡Qué barbaridad!
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