Por Omar Zúñiga
Pues nada…, resulta que los conteos rápidos de las elecciones celebradas este domingo 4 de junio en el Estado de México y Coahuila salieron como lo proyectó Dante Delgado Rannauro, líder y propietario de Movimiento Ciudadano, producto de una negociación entre PRI, PAN, PRD y Andrés Manuel López Obrador.
El Edomex, bastión no sólo priista, sino aliancista, prácticamente la garantía de triunfo en la presidencial de 2024, fue entregado a López Obrador a cambio de no meter a la cárcel a Alfredo del Mazo Maza, el último (y más pendejo, dicen) gobernador de la estirpe del añejo y otrora poderoso Grupo Atlacomulco, hijo y nieto de gobernador.
Hoy el Estado de México, tiene una candidata ganadora en la persona de la morenista Delfina Gómez.
La garantía que de Del Mazo aporta, incluye millonarios subejercicios que ascienden, sólo de 2019, 2020 y 2021, a 22 mil 275 millones 844 mil 140 pesos y 10 centavitos, lana que va a parar directamente a la Presidencia como gasto totalmente discrecional.
Esta lanita, a Del Mazo le garantiza -seguramente- además alguna una embajada, como ocurrió con los exgobernadores priistas, de Sinaloa Quirino Ordaz, hoy embajador en España; y de Sonora Claudia Pavovlich, cónsul general en Barcelona, pues el común denominador es la entrega de sus estados, millonarios subejercicios y servilismo político.
Coahuila también estaba cantado, el priista Manolo Jiménez arrasó en la votación con una diferencia de dos dígitos, que ni con la sumatoria de los tres candidatos de oposición le hubieran ganado, sin embargo la candidatura de Ricardo Mejía le da al PT una votación histórica; a Armando Guadiana de Morena una lección imborrable y a Lenin Pérez del partido local UDC, su registro y acceso al dinero público.
¿A quién le echarán la culpa las alianzas, cuando MC ni siquiera compitió?, es pregunta.
Lo que pasó este domingo será un reflejo de 2024 si la oposición desdibujada, arañándose entre ellos, llevando agua a sus molinos, olvidados totalmente de las causas ciudadanas, no retoma el camino, aunque ya van tarde, quizá aún haya tiempo.
¿Es imposible ganarle a Morena?, en las condiciones actuales, sí. Rotundamente.
Si se da un golpe timón, sería posible, pero ese golpe incluye democratizar a lo partidos y eso, empieza desde las dirigencias, los que ya bailaron que se sienten.
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Ya son muy fuertes los rumores de que la Directora General de Educación Primaria Federalizada Ana Laura García Calvillo, quien además tendría una relación muy cercana con el Subsecretario de Desarrollo Educativo de la SEV Moisés Pérez Domínguez, anda que no la calienta ni el sol, ya que los tiempos en que amarran las diputaciones están encima y nomás no ve claro con la promesa que le hizo su compañero, ¡vaya! y a como van las cosas con el profe ni a él mismo le va a tocar…
Resulta que el Profe Moi, el Mollejas (así le dicen, yo qué), ahora conocido como “el cobra” (porque cobra aquí y cobra allá) mejor conocido por sus correligionarios como Moiché$ (porque a todos sus subordinados les pide moche) tiene un nuevo problema, y es que la maestra Ana Laura García Calvillo, aliada de las más de mil y un batallas en el Movimiento Magisterial Popular Veracruzano (MMPV), ya le exige que le cumpla la promesa largamente anhelada, una curul en el Congreso local.
Por si fuera poca cosa, desde la llegada al frente de la Subsecretaría de Desarrollo Educativo de la SEV, de este para nada querido personaje, tildado por sus compañeros y subalternos como “hambriento y ruin”, el sujeto de marras fue muy claro con todo su equipo de colaboradores para pasar la charola a través de los jefes o recaudadores de los diezmos de cada oficina o departamento, “el moche” que se supone se había acordado “para seguir impulsando el proyecto político”.
Ahora, sabemos De Primera Mano, que Moisés Pérez Domínguez ha montado en cólera al enterarse que todos están ahora inconformes con la indicación, pues la queja generalizada es que el único proyecto que se ve que avanza, y muy bien, es el de la (su) acumulación de riqueza, casas, ranchos, coches, camionetas y el buen vivir, tanto del mismo Moisés como de todos sus hermanos, que de una u otra manera (jeje) cobran en la SEV, porque así como en Tantoyuca todo se sabe, también en la Secretaría donde se supone manda Zenyazen Escobar, y a él y a su familia ya no los quieren en ningún lado.
Irónicamente, sus mismos colaboradores afirman que no tiene ya la más mínima aceptación en su pueblo, ya que las pocas veces que se logra ver por allá, ni siquiera baja el cristal de su camioneta pues se acalora, y voltea la cara para no saludar o evitar una sonora mentada de madre en su cara.
También es una falacia lo de la estructura política que asegura tener en la zona, pues aseguran que lejos de ser una máquina bien aceitada, se cae a pedazos, ya que a los maestros y sus familias, los afilió a su agrupación con mentiras, engaños y jamás les cumplió.
Ya el hartazgo es tal, que esto ha llegado a varios oídos del Palacio de Gobierno, y dadas las múltiples quejas ante el mismísimo Cuitláhuac, está más que latente, que una de las directoras (que es bien vista en Palacio) de esta Subsecretaría, asuma la responsabilidad de Moi para tratar de rescatar la imagen de esta dependencia. Ya se verá, por vía de mientras, el tal Moiché$ está en capilla y si bien le va, su futuro estará solamente fuera de la nómina, porque ciertamente es candidato, pero a una temporada en Pacho Viejo.
¡Qué barbaridad!
deprimera.mano2020@gmail.com
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