El pasado domingo 13 de mayo se cumplió el primer cuarto del periodo de 60 días de campaña que la ley electoral vigente en la entidad le concede a los candidatos a la gubernatura del estado. En apenas dos semanas y dos días (hasta este martes), quienes aspiran a gobernar Veracruz los próximos seis años han comenzado a desplegar su activismo y a dar muestras de cuáles son sus fortalezas y activos rumbo a la jornada electoral del primer domingo de julio. En ese sentido, a 45 días de las elecciones, los veracruzanos comienzan a percibir quién es quién en el actual proceso electoral. Por un lado, se encuentra el candidato de la coalición Por Veracruz al Frente, del PAN-PRD-MC, Miguel Ángel Yunes Márquez, quien para nadie es un secreto hace campaña montado en la estructura política construida por el actual gobernador del estado a lo largo de 17 meses de gobierno. En ese tenor, la corriente política que lo respalda incluye a personajes y liderazgos – o cacicazgos- regionales, como los García Guzmán, hijos del ex contralor Ricardo García Guzmán, en Pánuco; los hermanos Guzmán Avilés, Joaquín Rosendo, Amado, Jesús y Rosario, en Tantoyuca; Los Picazzo y Romero en el Totonacapan; los Herrera Munguía y Castelán Crivelli en la zona de Córdoba; los Rementería en el puerto de Veracruz; los Tejeda y Flores Espinosa en Huatusco y la Mixtequilla; los Copete en Los Tuxtlas; los Condado en Acayucan, y los Tronco en Coatzacoalcos, por citar algunos. Pero también cuenta con el apoyo de más de cien presidentes municipales surgidos de la coalición PAN-PRD que gobierna la entidad. En términos absolutamente pragmáticos, ahí radica – en su estructura territorial - una de las dos principales fortalezas de Yunes Márquez en este proceso. La otra tiene que ver – de manera indirecta - con los recursos del programa “Veracruz Comienza Contigo”, que a decir del dirigente estatal de Morena, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, para este año son algo así como 3 mil millones de pesos concentrados de todas las áreas del gobierno, y por lo cual Yunes Márquez ya fue denunciado junto con el propio gobernador, y el secretario de Desarrollo Social, Rodrigo Marín Franco, ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales, FEPADE, y el Instituto Nacional Electoral, INE, por violentar la ley electoral con la entrega de monederos Mi Chedradui. Por otro lado, está el candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, de Morena-PT-PES, Cuitláhuac García Jiménez, cuya principal fortaleza es que su campaña va remolcada – literalmente - e impulsada por el arrastre electoral del candidato presidencial puntero en las encuestas, Andrés Manuel López Obrador. Cuitláhuac García es, de los tres candidatos con posibilidades de ganar la gubernatura, el que menos experiencia y trayectoria política y de gobierno tiene, por lo que su suerte dependerá de que López Obrador mantenga su tendencia electoral en las próximas semanas y que sus simpatizantes le otorguen a sus candidatos el voto parejo al que ha estado convocando en los últimos días. El tercer convocado en este proceso electoral para la gubernatura es el senador con licencia Pepe Yunes Zorrilla, candidato de la coalición Por un Veracruz Mejor, del PRI-PVEM, quien es, de los tres candidatos con posibilidades reales de triunfo, el que tiene mayor experiencia política y de gobierno. Pepe ya fue, al igual que Yunes Márquez, alcalde, pero además ha sido dos veces diputado federal, una vez diputado local, y durante más de 5 años senador de la república, donde presidió la Comisión de Hacienda, la más importante dado que tiene que ver con el proceso de integración del presupuesto del Gobierno Federal. Y justamente aquí radica una de las mayores fortalezas de Pepe Yunes, pues su paso por el Congreso le permitió gestionar varios miles de millones de pesos para obras carreteras, de infraestructura urbana y apoyo a los sectores productivos del estado, de tal manera que también ha logrado construir una corriente política a su favor. Pepe Yunes tiene, además, buenos puentes de comunicación con dos grupos de poder fáctico de gran influencia: la Iglesia Católica – que hace unas semanas se pronunció en contra de los políticos que quieren perpetuarse en el poder a través de su familia, lo que fue interpretado como un mensaje con dedicatoria al gobernador del estado - y el sector empresarial, golpeado en los últimos meses por la falta de inversiones y de pago de adeudos por parte del gobierno estatal. De la señora Miriam González Sheridan, queda claro que su participación en este proceso, además de circunstancial, es meramente testimonial. En síntesis, faltan 45 días de campaña, y la gubernatura de Veracruz aún está en veremos. |
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