Julio Ricardo Blanchet Cruz
DiarioLibertad@gmail.con.mx
No puede ser, que en pleno Siglo XXI, los hombres todavía se estén matando porque Alá, su Dios, es el mero bueno. Pues es todopoderoso y el único creador del mundo. Pero no tiene hijos ni hijas. Y todos deben vivir bajo sus Leyes -la Sharia-...
Los yihadistas del Estado Islámico -hay otros grupos que también están calificados como terroristas, pero son de Al Qaeda- Pero todos persiguen imponer esa forma de vida en todos los aspectos, el político, el social y el económico. Digamos que todos deben vivir como Dios manda...
Entre otras cosas, hay que adorar a Alá 5 veces al día. Lo que puede considerarse como una inseguridad por parte del Creador, que todo lo hizo para su propia satisfacción; para que lo adoren...
Pero qué puede esperarse de un Dios y un pueblo que tiene como Patriarca a Abraham un filicida frustrado que terminó como homicida; toda vez que sus sicarios no mataron a su hijo Ismael, pero si a su amante Agar, a quien Samuel cortó en pedazos delante de Jehová. Y lo mejor de todo, es que estos son los buenos, que quieren matar a los malos...
Y luego se espantan cuando el Presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan dice que Netanyahu y su gobierno son asesinos en serie. Total, que los Dioses, para lo único que les han servido a los humanos, es como pretexto para matarse entre ellos y apoderarse de los bienes del otro. Para eso sí que sirven los Dioses...
A todo esto...
El viceprimer Ministro de Serbia, Alexander Vulin, fue de la opinión, que la escalada de tensión entre las potencias nucleares, ya ha comenzado. La única cuestión es si el conflicto escalará hasta ese tipo de armas...
Pero no se soslayar que “El perdido va a todas”. Y no es el único lugar donde se están matando. Por lo que los cancilleres de Catar, Egipto, Arabia Saudí. Jordania, Irak, Irán, Turquía y Rusia, acordaron que la crisis en Siria supone un peligro para la seguridad del País y para el mundo entero. Así que, no hay que hacer planes a largo plazo.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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