EL PASADO 15 de mayo, cuatro meses y medio antes de concluir su mandato, el, entonces, presidente Andrés Manuel López Obrador insistió una vez más al Estado español que se disculpara por los excesos cometidos durante la conquista, una más de las ocurrencias que uso como distractor de los grandes problemas que afectaban –y siguen perturbando al País-. Y en aras de heredarle la bufonada a la sucesora, Claudia Sheinbaum Pardo, AMLO descartó que se tratara de un “asunto cerrado”, y en ese contexto lamentó que España no viera la importancia de ofrecer un gesto simbólico para mejorar las relaciones bilaterales. “No lo entendieron, era un acto para cerrar heridas, de reconciliación e iniciar una etapa nueva”. La última petición llegó en el tramo final de su Gobierno que por fortuna terminó el 1 de octubre de 2024, pero sirvió para revivir las tensiones que emergieron desde que envió una carta al Rey Felipe VI en marzo de 2019, apenas tres meses después de iniciar su mandato. Quizá lo bueno es que algunos gobernadores no se han prestado al juego retrógrada del oriundo de Macuspana, como es el caso de la mandataria de Veracruz, Norma Rocío Nahle García que, haciendo a un lado los afanes protagónicos de López Obrador, ha decidido ignorar sus chocanterías y hacerse presente los días 22 y 23 de enero en la Feria Internacional de Turismo (FITUR) a realizarse en Madrid, España con la finalidad de promover al Estado e impulsar el turismo. No se debe perder de vista que fue por Veracruz donde arribaron los conquistadores encabezados por Hernán Cortez, y que la zona fue reconocida por primera vez en la expedición del capitán Juan de Grijalva de 1518, dando el nombre de San Juan de Ulúa al islote costero más cercano a tierra. La Villa Rica de la Vera Cruz fue fundada por el conquistador español Hernán Cortés el 22 de abril de 1519 en las playas que se encontraban frente al islote, llamadas Chalchihuecan. Se trató del primer Ayuntamiento en la América continental y una de las primeras ciudades en ser fundada por europeos en toda la América continental. Sus primeros alcaldes y concejales fueron Francisco de Montejo y Alonso Hernández Portocarrero.
VERACRUZ SE convirtió en el principal puerto del virreinato de Nueva España. Cada viaje de la Carrera de Indias, única ruta autorizada del comercio en el imperio Español hacia y desde Hispanoamérica establecida en 1522, concentraba en Veracruz a multitud de estibadores, arrieros, navegantes, marinos, asentistas, comerciantes y empleados de la Administración. En 1568 el almirante Francisco Luján derrotó ostensiblemente a los piratas ingleses Drake y Hawkins. San Juan de Ulúa contaba entonces con una muralla al lado de tierra, casas, iglesia y hospital, y su fortificación tuvo lugar en 1590. En 1599 el rey Felipe II de España decretó la ubicación definitiva de Veracruz en su lugar primitivo. Años después, en 1607, el Puerto de Veracruz adquirió el título de ciudad, confirmado en 1640 por el rey Felipe IV, lo que la convierte en una de las ciudades más antiguas de México. A inicios del siglo XVII aparecieron varios edificios, en 1608 se construyeron la casa de cabildo (hoy palacio municipal) y el convento de Nuestra Señora de la Merced, al tiempo que se continuaba la fortificación de San Juan de Ulúa y se iniciaba la obra del Hospital de nuestra Señora de Loreto. En 1638 el Santo Oficio condenó a ejecución o expulsión a los más relevantes comerciantes de Veracruz, acusados de colaboracionismo con el imperio portugués contra España y judaísmo. En 1640 se organizó la Armada de Barlovento para defender el litoral de los piratas, mientras que, en 1683 sufrió el dañino ataque del pirata holandés Laurens de Graaf.
POR ELLO, qué bueno que Rocío Nahle haya decidido hacer a un lado el protagonismo de AMLO y retome las buenas relaciones con España que, nos guste a no, aceleró en el País el desarrollo, además de inculcar una religión que a la fecha sigue siendo la más importante para el pueblo, y en ese tenor emprenda un viaje a Madrid para difundir que Veracruz espera a todos los españoles con los brazos abiertos, pidan o no perdón por la conquista, y en su ausencia el estado se queda en buena manos, en este caso, bajo la batuta del secretario de Gobierno, Ricardo Ahued Bardahuil, Con la Gobernadora viajará la Secretaria de Turismo, la de Cultura, una persona de Comunicación Social, así como un grupo de jaraneros, artesanos, además de que llevarán café del que se produce en el Estado. La agenda –en la que participarán 30 personas- será corta: “Yo salgo el 21, llegó el 22 a las 5:00 de la mañana, a las 10 de la mañana tiempo de Madrid estaremos en la inauguración, todo ese día voy a estar ahí en entrevistas y demás, el 23 también hay una agenda, va la Secretaría de Turismo federal y creo que somos tres gobernadores nada más y me regresó el 23”.
SIN DUDA, la decisión de acudir a la madre patria a promover turísticamente al Estado –e incluso, industrialmente- es viable. México enfrenta una grave crisis de inseguridad que ha traspasado fronteras y que le colocan en el concierto de las naciones europeas e, incluso, ante Estados Unidos y Canadá como un País tercermundista donde prevalecen los grupos delincuenciales, y por ello es menester que en la Entidad haya alternativas no solo para la inversión sino para conocer los rincones más importantes que ofrecen a los visitantes una rica gastronomía, hotelería para todos los gustos, rutas históricas y una amplia gama para ofrecer al turismo.
GOBERNAR COMO lo hizo López Obrador, en una burbuja de cristal, sin salir al primer mundo para promover al País y ofrecer alternativas a los foráneos es retrógrada, retardatario y alejado de una visión progresista. Y aunque López Obrador asuma que ofrecer disculpas es “actuar con humildad”, lo cierto es que semejante postura nacionalera solo provocó un alejamiento con España, una nación que tiene fuertes inversiones en México lo mismo en materia de educación, cultura, instituciones financieras y servicios, e incluso en salud, pero el comunismo mal entendido de AMLO le impidió ver más allá de su nariz.
QUE BUENO que Rocío Nahle García entienda que,
Veracruz y España tienen una relación histórica que se remonta a la fundación de la ciudad por Hernán Cortés en 1519, y que fuimos el primer ayuntamiento de América continental y un puerto importante para el comercio entre Europa y América, convirtiéndose en un baluarte comercial, político y militar en el Golfo de México. No se olvida que Veracruz fue el puerto de entrada de cerca de 30 mil españoles exiliados tras la Guerra Civil Española, y que el pueblo mexicano recibió a los refugiados con entusiasmo. Basta ya de pensamientos retrógradas o reaccionarios para distraer al pueblo de los grandes problemas que le aquejan, y ojalá la Presidenta Claudia Sheinbaum decida gobernar con su propio criterio y no con la línea que le sigue trazando López Obrador. Ya algunos Gobernadores como Roció Nahle dieron un paso adelante, y se les reconoce y felicita. No mas populismo absurdo usando a la pobreza como escudo, Bien por Nahle García. OPINA carjesus30@hotmail.com
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